«La alimentación y el crecimiento, sí o sí, deben ir vinculados a la dignidad»
Vicente Domingo, Director del CEMAS (Centro Mundial de Valencia para la Alimentación Urbana Sostenible)
Vicente Domingo, Director del CEMAS (Centro Mundial de Valencia para la Alimentación Urbana Sostenible)
Ya no podemos contaminar más el mar. Ya no podemos robar los recursos en la otra punta del mundo. Necesitamos un replanteamiento, hacer algo tremendamente humano: pararnos, ver cómo hemos llegado hasta aquí y comprobar que ya no hay tierra incógnita por descubrir, explica Vicente. Cuando analizamos el ejercicio diario de alimentar a millones de personas en el mundo nos damos cuenta de que hablar de alimentación ya no es solo hablar de nutrición, sino que implica tratar cientos de parcelas de conocimiento –desde la biología hasta el derecho– que convergen en un espacio común de responsabilidad.
Esa es la clave: el multilateralismo, una llamada de acción a todos los agentes de la sociedad, desde familias hasta administraciones, que componen el vivir (o el malvivir) de las personas. La alimentación y el crecimiento, sí o sí, deben ir vinculados a la dignidad. De quien lo consume, pero también de quien lo produce, lo transforma y lo asume. La gran luz al final del túnel tiene forma de dignidad. Nada puede crecer si no se considera el sentido de la dignidad. Gestionar el alimento y revalorizar su concepto es la salida que tenemos, la salida de los ganadores. Si no se sale así, no habrá espacio humano en el que desarrollarse.