Como no hay nada mejor que predicar con el ejemplo, Aguas Danone anunció en la cumbre su objetivo de convertir su marca Lanjarón en 100% circular para el 2021. De hecho, el embotellado de Lanjarón Red de 1,25 litros ya es 100% circular (reciclada y reciclable), y todos los beneficios que se obtienen de sus ventas financian proyectos de preservación de la naturaleza.
En la misma línea, Sander Defruyt, de la Fundación Ellen Macarthur, líder en acelerar la transición a la economía circular desde el diseño, habló de la capacidad de elección de cada negocio, y su responsabilidad con cada acción:
«Cada compañía decide qué productos poner en el mercado, dónde obtener sus materias primas, cómo diseñar su packaging, y qué modelos de negocio utilizar para ofrecer sus productos a los consumidores. En este sentido, cada empresa juega un papel crucial a la hora de diseñar el sistema del futuro.»
Una vez más, todo está en nuestras manos. La coherencia con la que hagamos las cosas a partir de ahora será clave para poder tener un futuro en el que vivir. La actuación debe ser inmediata, coordinada y externa a ideologías. Al fin y al cabo, todos somos ciudadanos de un lugar llamado mundo, ¿no?